Es una disciplina que estudia la relación entre la alimentación, el sistema digestivo y el funcionamiento del cerebro.
Se basa en la evidencia de que lo que comemos influye directamente en nuestra salud mental, emocional y cognitiva, a través del eje intestino-cerebro. Este enfoque integral considera cómo los nutrientes, la microbiota intestinal y los hábitos alimentarios pueden prevenir o mejorar trastornos como la ansiedad, la depresión, o el deterioro cognitivo, promoviendo así un bienestar duradero desde dentro hacia fuera.
Consultas online personalizadas para transformar tu salud desde la raíz: microbiota y bienestar mental.




¿Tienes dudas? Empieza con la consulta inicial: el primer paso para entender tu cuerpo y recuperar tu equilibrio.
La primera consulta consiste en una valoración global: analizamos tu historia clínica, hábitos, síntomas y estilo de vida. A partir de ahí, diseñamos un plan de tratamiento personalizado y te damos las primeras pautas para comenzar el cambio.
Cada persona es diferente, pero muchos pacientes experimentan mejoras en sus niveles de energía, digestión y estado de ánimo en las primeras semanas. Los beneficios más profundos se consolidan con el seguimiento y la continuidad del tratamiento.
Sí, la Neuronutrición Integrativa no sustituye la medicina convencional, sino que la complementa. Trabajamos de forma paralela para potenciar sus efectos y mejorar la recuperación del paciente.
En algunos casos recomendamos estudios de microbiota o analíticas específicas para personalizar aún más el tratamiento, aunque no siempre son imprescindibles. La valoración se hará a lo largo del tratamiento.
No. Aunque la salud intestinal es la base, la Neuronutrición Integrativa tiene impacto en el sistema inmunológico, hormonal, emocional y neurológico. Por eso puede ayudar en patologías tan diversas como ansiedad, migrañas, fatiga crónica, autoinmunidad o incluso en la prevención de enfermedades neurodegenerativas.
El uso de suplementos como probióticos se adapta a cada persona y se utiliza durante el tiempo necesario. El objetivo siempre es que el cuerpo recupere su equilibrio de forma natural y sostenible.